Carla Díaz vive su segunda etapa en el club del Chapatal.
Carla es una de esas jugadoras que les llena un aura de luchadora, guerrera, una de esas personas que vive el baloncesto, ahora también lo hace no solo en la parcela de jugadora, sino como entrenadora, donde lleva unos años trasmitiendo esa pasión a los más pequeños y más pequeñas.
¿Quién es Carla Díaz?
Me considero una persona sencilla,
trabajadora, abierta y siempre dispuesta a mejorar. Entre mis inquietudes se
encuentra jugar al baloncesto, leer y disfrutar de la gente que me rodea.
Actualmente soy jugadora de baloncesto de la liga de Primera Autonómica,
compagino el deporte con el estudio y la preparación de las Oposiciones de
Maestra, además de entrenar un equipo de niñas en el CB Tenerife Central. Mi
experiencia como jugadora de baloncesto me ha hecho adquirir un gran afán de superación,
sentido del trabajo en equipo y espíritu positivo, valores que creo pueden
contribuir en cualquier aspecto de la vida. La característica que más destaco,
es el hecho de que soy muy insistente a la hora de trabajar por lograr mis
objetivos.
¿Dónde y cuándo empezaste a
decantarte por el baloncesto?
Me decanté con apenas 10 años, mis
actividades extra-escolares eran muchas (clases de piano, natación y gimnasia
rítmica) porque por aquel entonces mi madre trabajaba a turno partido y tenía
que buscar la manera de invertir mi tiempo en algo productivo. Un día mientras
iba a clases de natación hablaron conmigo y me invitaron a probar el baloncesto
y finalmente me decanté.
Te formaste en el Chapatal luego te
fuiste y ahora has vuelto ¿Qué nos puedes contar de esa magia que desprende el
Chapatal?
Es la cancha que me inició y me
apasionó al baloncesto y en la que me gustaría transmitirles a mis jugadoras
todo lo que he podido aprender en mi trayectoria como jugadora, donde puedan
disfrutar de este deporte tanto como lo hago yo. Mi amiga Elena Ramallo fue clave para tomar la decisión de entrenar en el Chapatal.
¿Cómo ves al equipo?
La Liga de Primera Autonómica es
una liga dura, partidos reñidos de toma de decisiones en el último momento y
contando con la presencia de jugadoras veteranas y muchas de ellas reconocidas.
Nuestro equipo es uno de los más jóvenes de la categoría, contando con la presencia de jugadoras de edad júnior, con un gran margen de mejora, que
se irá consiguiendo a base de experiencia, trabajo, sobre-esfuerzos, ganas y
afrontando cada partido con ilusión para poco a poco conseguir los objetivos.
¿Qué equipo y jugadora te parece
más determinante?
Equipo el Adareva y jugadora
determinante Eva Serra.
Fuiste voluntaria en el Mundial
Femenino ¿Cómo fue la experiencia?
Las palabras no son suficientes
para describir la experiencia vivida, uno de mis momentos más impactantes
recuerdo que fue encontrarme en el pasillo a jugadoras como Diana Taurassi y
Brittney Griner estirando antes de un partido mientras me temblaban las piernas
de los nervios, o compartir la experiencia de ver a jugadoras como Alba Torrens
o Laura Nicholls que siempre fueron un modelo a seguir. Además, son
experiencias que me han sumado de manera muy positiva en mi día a día tanto de
jugadora como de entrenadora. Muy recomendado.
En los últimos años cada vez salen
más chicas y chicos fuera, en su caso tiene el ejemplo de su hermana Graciela
¿Por qué pasa esto?
En mi opinión la oferta de afuera
siempre atrae más y siempre tienes más posibilidad de vivir de esto, se te da
una posibilidad de estudiar y de compaginar los estudios, en cambio, aquí las
cosas son un poco más diferentes, es muy difícil vivir del baloncesto, contando
con que los estudios suelen ir por un lado y el deporte por otro. Los clubes
fomentan que estudiar es importante, pero desde las Universidades y escuelas no
se potencia que un jugador pueda dedicarse a jugar y velar por su futuro
por eso muchas veces deciden irse fuera para buscar mejores cosas para crecer.
¿Qué haces cuando sueltas la
pelota?
No suelo tener mucho tiempo libre,
pero intento invertirlo en pasar tiempo con mis amigos y familia, salir y
desconectar de todo un poco.
Para terminar y como reflexión, involucrarse
en el mundo del baloncesto cuando somos pequeños con el volumen de estudio y
entrenamientos menor no se hace difícil pero el problema empieza a aparecer
cuando las horas de estudio aumentan y las tareas se vuelven más exigentes, no
todos los padres suelen lidiar fácilmente la combinación de estudios y
deporte. En mi opinión los padres juegan un papel fundamental en la vida
deportiva. La cuestión está en saber establecer un equilibrio
entre estudios y deporte y darles a entender que esto lleva un esfuerzo
que no todo están dispuesto a pagar pero que se puede llegar a conseguir. Lo
más importante es rodearte de personas que te apoyen.
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